el día que descubrí q mi madre era la que me dejaba la bolsa de chucherías y no “el ratoncito Pérez”.
-El día que mi hermano mayor me contó que los reyes no existían, que él había ido a comprar los regalos con mis padres.
-El día que vi como él, con quien llevaba soñando semanas, se fue de la mano de aquella rubia tonta que yo no soportaba.
-El día que fui consciente que mi perro ya tenía que tener 26 años y que era imposible que siguiera viviendo con esos “amigos con casa en la playa donde era más feliz”.
-El día que por mucho que lo intenté no lo conseguí.
-El día que me dieron las notas y vi que no podía entrar en la carrera que quería.
...El día en el que aprendí que querer es lo principal pero no suficiente.
4 comentarios:
Exacto... querer es lo principal.
Querer es poder... o no. Pero hay que intentarlo siempre!^^
Abrazos!
joer, así parece hasta que la vida no merece la pena! Bueno, siempre nos quedará papá Noel, porque él sí existe, verdad?
y el dia que eres consciente de que "nada es para siempre", pero aún así merece, y mucho, la pena estar aquí, e incluso a veces sufrir, aunque como tú dices "querer no sea suficiente"
A mi lo que más me cuesta es subir las escaleras de tu casa... Eso sí que es doloroso, el resto tiene solución siempre que quieras. Sólo tienes que avisarme con tiempo.
Y bueno... en definitiva, me tienes que dejar hacer muchas cosas más... pero ya eso te lo digo por otro sitio.
Así, que... con querer es suficiente.
;)
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